Septiembre llega con un ambiente especial En Ca’n Joan de S’Aigo, la heladería y chocolatería más antigua de Palma: tras años endulzando meriendas, nuestro local se convierte en el refugio imprescindible para quienes participan en Canamunt i Canavall, la celebración más emblemática de la ciudad. Esta fiesta, que enfrenta a los que pertenecen a La Calatrava (Canamunt) y a los que pertenecen a La Lonja (Canavall) desde el siglo XVII, ha evolucionado de una disputa por el privilegio de llevar la imagen de Sant Pere a una jornada de juegos populares, agua y reconciliación, y nosotros estamos orgullosos de acompañar a Palma con nuestros sabores tradicionales.
Historia de Canamunt i Canavall: de pleitos a jolgorio
La génesis de Canamunt i Canavall data de 1654, cuando ambos gremios reclamaron alternarse el honor de llevar la imagen de Sant Pere en procesión. Con el tiempo, la rivalidad se tornó en fiesta y hoy, miles de personas participan en los juegos más emblemáticos de Palma y visten camisetas rojas o amarillas mientras compiten en un ambiente de diversión que respeta el génesis noble de la tradición.
Canamunt i Canavall hoy: un canto a la comunidad
Cada primer domingo de septiembre, podrás unirte a los múltiples juegos:
- Carreras de sacos en la Plaça de la Drassana.
- Tirada de cabo en la Plaça de la Lonja.
- Batallas de agua junto al Parc de la Mar.
- Cant d’estil y bailes de colles, que mezclan la música y la danza tradicional de la isla.
Es una fiesta donde la tradición palmesana se vive con intensidad, y el punto culminante es el cruce simbólico entre Canamunt y Canavall: un gesto de amistad que solo puede celebrarse con buena compañía y, sobre todo, el mejor sabor mallorquín.
El papel de Ca’n Joan de S’Aigo: dulce tregua tras la competición
Nuestro local del Carrer Can Sanç, 10, el de Carrer del Baró de Santa Maria del Sepulcre, 5, y el de Carrer del Sindicat, 74, abren sus puertas para ofrecer un espacio de convivencia y paz para reponer fuerzas y compartir buenos momentos.
- Ensaïmades tradicionales y cuartos artesanals: masas fermentadas con mimo, doradas y esponjosas, perfectas para recobrar energías.
- Helado de almendra y horchata de almendra: la bebida del verano en Palma, a la que nadie es capaz de resistirse, y menos, después de unos acalorados juegos.
- Robiols de requesón, chocolate, crema pastelera, mermelada de albaricoque y crespells: dulces históricos que prolongan la tregua con un toque de nostalgia.
En Ca’n Joan de S’Aigo, más de 300 años de historia garantizan que cada bocado y cada sorbo estén cargados de memoria colectiva. Bajo las baldosas hidráulicas y junto a las sillas de roble centenario, los vecinos de Canamunt y Canavall encuentran un lugar donde la rivalidad se disuelve, y el auténtico sabor mallorquín une corazones.
Visita Ca’n Joan de S’Aigo este Canamunt i Canavall y descubre por qué somos el destino preferido para sellar la tregua más dulce de Palma. Te esperamos con las bandejas repletas de nuestros clásicos, para que disfrutes de la reconciliación más sabrosa de la ciudad.
